Educar en la igualdad sin machotes ni princesitas
Tengo un amigo feminista que ejerce como tal con un buen blog que de vez en cuando me da que pensar. Me acordaba de él ayer al oír por millonésima vez a un padre (con la mejor intención del mundo, lo sé de buena tinta) consolado a su hijo de siete años tras una caída en el…